domingo, 25 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Conclusiones Finales

Despedimos esta nueva edición del festival donostiarra, y antes de adentrarnos en las valoraciones y el análisis del palmarés oficial, valoramos la última película vista en el certamen, ayer, día de premios y despedidas. 


Se trata de la nueva cinta de Joachim Lafosse, ganador en la edición pasada de la Concha de Plata al mejor director por la interesante "Los caballeros blancos", que vuelve con probablemente su película más redonda: "Después de nosotros". Estamos ante un film de formulación sencilla, que encuentra en sus muchos matices la denominación humana que alcanza. La minuciosa reflexión sobre los límites del amor de pareja, y su continuidad tras su agotamiento, y más en ciertos casos concretos, deriva en una historia de humanos sentimientos tan llena de verdad que abruma. Es de admirar como Lafosse, tanto en su labor de guionista como de director, mantiene firme y discreta la postura sobre los personajes, evitando que caigan en melodramas culebronescos, en excesos innecesarios, y en definitiva, consiguiendo que el ruido, tan propenso a invadir este tipo de historias, se encuentre lejos en pro de un acercamiento detallista. Es de admirar además de la labor de su realizador, el trabajo actoral absolutamente admirable, en el que destaca esa magnífica actriz llamada Bérénice Bejo, que firma una magistral composición. Recordad el momento en que Maître Gims con "Bella" pone música a la película, porque quedará muy grabado en la retina, por la magnificencia de sus intenciones y expresiones.


Tras contemplar la última película de este certamen, hay que valorar un palmarés que vuelve a retomar la incorrecta decisión de los jurados años atrás en este festival. "Yo no soy Madame Bovary" se proclama como la gran triunfadora, en una edición muy irregular, pero que albergaba películas superiores a la premiada, la cual ha cosechado dos grandes galardones. Si bien el premio femenino es entendible, aunque hubiera decisiones mejores (Sidse Babett Knudsen, Lee You-young, Florence Pugh), la opción de otorgarle a una película valorada de absoluta irregularidad la Concha de Oro rechina mucho, cuando había opciones mucho mejores y más cuando se han quedado fuera del palmarés oficial tres de las grandes películas de la Sección Oficial: "Lady Macbeth", "La reconquista" y "Playground". Los premios para las películas de Emiliano Torres "El invierno" (Premio Especial del Jurado Ex aequo y mejor fotografía) " y Johannes Nyholm "The Giant" (Premio Especial del Jurado Ex aequo), sin bien no del todo merecidos, eran entendibles, pues ambas se ajustan muy bien al perfil de película premiable en esta edición. Esperada también fue la presencia de la cinta de Rodrigo Sorogoyen en el palmarés, pero no en forma de mejor guion, ya que las bazas de esta cinta se encontraban en otros aspectos. Felices con los más merecidos reconocimientos a Hong Sang-soo (Mejor director) y a Eduard Fernández (Mejor actor), ajustando en definitiva un palmarés en parte predecible, pero que podía haber atinado mucho más en sus opciones.
*Para consultar el palmarés completo de esta edición, puedes acudir Aquí.

Tras más de una semana de intenso festival, hay que concluir esta especie de diario, valorando un festival, que en términos generales ha sido irregular, en especial en su Sección Oficial, albergando una media de calidad cinematográfica baja. Perlas y Horizontes Latinos han salvado los platos, consiguiendo ser esta última la mejor del certamen, un año más. 
A continuación, os presentamos para cerrar este seguimiento y despedirnos hasta el año que viene, las mejores películas, actores y actrices del festival a juicio personal que nos ha dado esta 64 edición. Un año más, un placer poder disfrutar de este festival y ofrecéroslo a vosotros. ¡Hasta la próxima!

Mejor película:
 









1. La región salvaje
2. Frantz
3. Elle
4. Después de nosotros
5. On the Milky Road
6. Sierra Nevada
7. Playground
8. El porvenir
9. Lady Macbeth
10. La reconquista

Mejor interpretación masculina:











1. Dave Johns "Yo, Daniel Blake"
2. Roberto Álamo "Que Dios nos perdone"
3. Mimi Branescu "Sierra Nevada"
4. Jesús Meza "La región salvaje"
5. Edén Villavicencio "La región salvaje"
6. Javier Pereira "Que Dios nos perdone"

Mejor interpretación femenina:













1. Isabelle Huppert "Elle"
2. Isabelle Huppert "El porvenir"
3. Bérénice Bejo "Después de nosotros"
4. Florence Pugh "Lady Macbeth"
5. Ruth Jazmín Ramos "La región salvaje"
6. Dana Gogaru "Sierra Nevada"

sábado, 24 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Séptima Jornada (Quiniela)

Ya en el último día del festival, a la espera del Palmarés Oficial y del cierre de este interesante festival. Ayer viernes, pudimos disfrutar de algunas de las últimas películas que hemos seleccionado de esta edición. Por la mañana, los ecos de la película de clausura (que será proyectada hoy en el Kursaal tras la gala de clausura), "The Odissey" de Jérôme Salle, fueron buenos. Y nosotros asistimos a tres películas en esta penúltima jornada:


La japonesa "Rage" de Lee Sang-il, última en competición, si bien nos interesa e incluso fascina en su arranque, poco a poco se va desinflando hasta derivar en un producto telenovelero, que entre el exceso y el alargamiento se mueve. Es una lástima que una película tan firme en sus principios acabe derivando en tal ejercicio, que resulta hasta ridículo. Esta crónica sobre la ira y la identidad, a través de un puzzle de historias cruzadas, encuentra su mejor baza con diferencia en los trabajos masculinos, que bien podrían, alguno de ellos, alzarse con la Concha de interpretación, frente a una dirección pobre y un guion de planteamientos y desarrollos insuficientes. Una película olvidable, que cierra una competición oficial bastante insuficiente.


El siguiente film, se trata de la esperadísima última película de Denis Villeneuve, "La llegada" (Perlas). Un ejercicio de ciencia ficción sobre la llegada de unos curiosos extraterrestres. La confianza en este realizador canadiense siempre es alta, pues así lo demuestra la entereza de sus anteriores trabajos. Pero esta vez, atiende a un ejercicio desequilibrado, pues aunque la película comienza con fuerza, su desarrollo poco a poco la va mermando, hasta llegar a un final que rechina por ridículo. Las trampas del guion para hacerlo grandilocuente son tan obvias que nos alejan absolutamente de la empatía emocional y racional de la historia. Es una lástima que un director con tantas habilidades e ingenio haya sucumbido a los métodos más tramposos (similares a los del sobrevaloradísimo Nolan) para dar cuerpo a esta película. En contraste, es admirable el ejercicio de atmósfera, guiado por una firme dirección y respaldado por una brillantez técnica, donde la notable fotografía, los sobresaliente efectos especiales y sobre todo la hipnótica y memorable música de Jóhann Jóhannson consiguen sumergirte en el universo que plantea la película. El ejercicio interpretativo se muestra desigual, aunque su líder, una magnética Amy Adams defiende con solvencia su personaje y nos aporta humanidad ante los ecos de artificio que ondean por la cinta. El resultado es un ejercicio imperfecto, que merece ser visitado por su capacidades audiovisuales.

La última película de la jornada, ubicada en la sección Made in Spain, se trata de "Zipi y Zape y la isla del capitán", de Oskar Santos. Un retorno a las aventuras de los personajes creados por José Escobar en una película que se muestra algo peor a su antecesora, ya que le cuesta mantener el ritmo, y sus dos protagonistas (personajes y actores) resultan irritantes. Aún así, nos encontramos con un producto digno, en el que descubrimos un interesante aporte. Se trata de la señorita Pam, personaje muy bien diseñado y de interesantes connotaciones, y defendido con solvencia por una estupenda Elena Anaya. Una vez más, vuelve a destacar la dirección de arte, los efectos especiales y la notable música de Fernando Velázquez, en una de las apuestas técnicas más firmes de nuestro cine este año. Un entretenimiento aceptable, que ya pide encontrar cierto fin a sus aventuras.

Estas películas marcan el final de una jornada y nos devuelven de nuevo a la presente, para contemplar y valorar lo que puede ocurrir dentro de unas horas, cuando se de a conocer el Palmarés Oficial de la 64 edición de este festival. De momento se conocen pocos premios (Premio del Público, Feroz Zinemaldia, Cine en construcción), y una vez analizadas y valoradas todas las películas vistas y no vistas, esta es la decisión que creemos va a tomar el jurado liderado por Bille August. De igual modo, junto a nuestra apuesta, podéis ver nuestro palmarés personal:

Concha de Oro a la mejor película: Lo tuyo y tú, de Hong Sang-soo/ Playground, de Bartosz M. Kowalski
Premio Especial del Jurado: The Giant, de Johannes Nyholm/ Lady Macbeth, de William Oldroyd
Concha de Plata a la mejor dirección: Bartosz M. Kowalski "Playground"/ Jonás Trueba "La reconquista"
Concha de Plata a la mejor actriz: Florence Pugh "Lady Macbeth"/ Florence Pugh "Lady Macbeth"
Concha de Plata al mejor actor: Roberto Álamo "Que Dios nos perdone"/ Eduard Fernández "El hombre de las mil caras"
Premio del Jurado al mejor guion: Jonás Trueba "La reconquista"/ Jonás Trueba "La reconquista"
Premio del Jurado a la mejor fotografía: Ramiro Civita "El invierno"/ Ramiro Civita "El invierno"

viernes, 23 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Sexta Jornada

Repasamos ya el jueves (cada vez queda menos para cerrar este festival). La Sección Oficial ha dado dos títulos que han sido aplaudidos, para sorpresa, pues llevamos un festival de calidad bastante pobre. Fuera de concurso la animación japonesa "Your Name", y a concurso, quizás de una las más firmes candidatas a la Concha de Oro, la coreana "Lo tuyo y tú" de Hong Sang-soo. En Perlas, "Fuego en el mar", último Oso de Oro de Berlín, ha recibido una cálida acogida. Y dentro de lo visto, hay que señalar tres films a concurso en la Sección Oficial y la primera película que vemos visto de Horizontes Latinos.

La primera película de la jornada, ha sido la nueva cinta de ese curioso cineasta llamado Jonás Trueba. Un cineasta con un discurso muy claro, y que se une a cierta tendencia renovadora del lenguaje en el cine español, aunque con ciertos tics que ya llegan a agotar. En "La reconquista", cuya inclusión en este festival ya nos resultó extraña, da un salto adelante en la depuración de un estilo propio. Si el film arranca con la habitual pedantería de su realizador, con un extenso diálogo entre sus dos protagonistas inundado de soberbias e inoportunidades, que llega a resultar bastante cansino, a medio camino la cinta despega y lo hace con tal belleza y sensibilidad, que emociona. Las miradas, las precisas palabras, los colores, las bonitas canciones (Brillante el aporte musical de Rafael Berrio) conjugan una película que medita sobre los devenires del amor, que precisa sus reflexiones sobre las primeras grandes sensaciones de la vida y aquellas personas que elegimos para compartir nuestra vida en primera instancia. La historia, aunque imperfecta, al final rezuma nostalgia, elegancia y belleza. Estamos ante la mejor obra de su realizador tanto desde el punto de vista de la construcción del discurso, como en el aspecto formal (bellísima fotografía). Huele a premio y ojalá que así sea.


Seguimos con la argentina, de Emiliano Torres, "El invierno". Una película que, aunque de arranque prometedor, se pasea por todo su metraje de forma anodina. Estamos ante un film sin personajes, sin giros, sin historia. Tan solo asistimos a un cuadro de la Patagonia, que transcurre de forma lenta, hasta soporífera, al compás de dos personajes de diferentes generaciones. Atendemos a entender lo que Torres ha querido transmitir, pero ello no está bien labrado y los personajes se muestran en un estado de inexpresividad tal que cuando atendemos al desencadente final, la decisión nos parece completamente forzada y algo inexplicable. Ni siquiera la firmeza de los dos actores consigue levantar un ejercicio anodino, en el que brilla, por encima de todo, un trabajo fotográfico naturalista que consigue grandes momentos de bella formal, ya que en definitiva esa es la gran baza del film, pues su narrativa permanece inerte. No obstante, es un film muy premiable y no sería raro viéndolo ganar algún que otro premio. Premio casi seguro para su fotografía, desde luego.


Terminamos la Sección Oficial, por hoy, con el salto a la dirección en solitario del reconocido actor  Ewan McGregor. "American Pastoral", basada en la novela de Philip Roth, se plantea como un ejercicio reflexivo sobre la crisis y confusión de valores de un momento concreto de la historia norteamericana, a través de la compleja historia de una familia. La película avanza con ritmo y se sigue con comodidad, gracias en gran parte al magnífico trabajo musical de Alexandre Desplat, pero la fallida dirección y los continuos derrapes de un guion que no sabe por donde enfocar la historia, ni que papel darle a sus personajes, hacen que el film se muestre desequilibrado y obviamente fallido. Si la sensiblería invade el primer tramo de la cinta, el resto alude a un tremendismo impostado que rechina demasiado. Se nos quiere hacer ver la complejidad y dificultad de la situación planteada, a través de diálogos excesivos, interpretaciones forzadas y un ejercicio fotográfico de constrastes. Con ello, asistimos a un entretenimiento que no decae, en parte gracias a la cercanía de su discurso y a ciertas apuestas técnicas, que hacen que el envoltorio sea solvente.


La última película del día brilla con luz propia. Amat Escalante, uno de los genios del cine iberoamericano, retoma su crónica social de un modo en cierta manera diferente con "La región salvaje". Una película que a través de una determinación entre lo fantástico y lo tenebroso construye un esquema de metáforas, cuyo objetivo final es denunciar la masacre que inunda México. La capacidad para crear atmósfera, y mantenernos en tensión durante todo el metraje abruma, pero también las continuas dialécticas que plantea la película una vez abandonado su visionado. Estamos ante un ejercicio mayor en el que la denominación de lo salvaje adquiere una determinación muy clara dentro del contexto de referencia, y lo hace a través de ese monstruo que ciertamente estimula y anima a buscar nuevos significados. La brillantez formal de ese gran maestro, en comunión con un equipo técnico notable (brillante fotografía) y unos actores impagables, se muestra siempre al servicio de un discurso que hiela la sangre, que te hace pensar y te hace confabular tus propias decisiones y posturas ante el compendio conceptual que nos atiende. Obra Maestra, de impagables repercusiones, y que desde ya se ha convertido en nuestra película favorita de esta edición del Zinemaldia.

Hoy viernes, vamos con las últimas películas a competición y mañana ya tendremos nuestra quiniela y el palmarés personal.

jueves, 22 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Quinta Jornada

En la jornada del miércoles, de carácter especial por la entrega del premio Donostia a una dama del cine como es Sigourney Weaver, películas de corte muy social y de al otro lado del charco, han acumulado la reacciones más sonoras. En Sección Oficial, la explícita "Jesús", ha determinado una recepción negativa, frente a la buena acogida de dos cintas de la sección Horizontes Latinos, de nuevo, "Santa y Andrés" y "El amparo". En lo visto, hay que hablar de tres películas, muy diferentes entre sí.

La primera, y de larga duración, es la nueva cinta del aclamado e inquietante cineasta rumano Cristi Puiu, un gran renovador del lenguaje cinematográfico dentro de esa tendencia en auge del cine rumano. "Sierra Nevada" (Perlas), muy aplaudida en Cannes, nos ha depcionado en cierta medida. Pues si bien nos encontramos ante un film muy sólido, le falta definición en ciertos tramos de su extenso recorrido para lograr ser una película redonda. Si es cierto que la película en ningún momento resulta plomiza, pero cuesta al mismo tiempo encontrar la grandilocuencia de su discurso, a pesar de su arriesgada apuesta. Un film de espacios mínimos y diálogos máximos, que busca en su discurso una crónica sobre los males de la cultura, la sociedad y por ende, los ejes políticos. Un film que sacude todos los puntos de nuestra actualidad y que verbaliza con garra sus motivos, gracias a un reparto extraordinario, donde todos y cada uno consiguen que ciertas flaquezas queden disimuladas ante la excelencia de sus trabajos. Era díficil lograr una película así, y hay que admirar el riesgo y la conciencia de un guion, que aunque imperfecto, consigue levantar una obra muy interesante, que presiento el tiempo pondrá en su lugar.

La segunda película es la última e inesperada Palma de Oro de este año, "Yo, Daniel Blake" (Perlas). La segunda para el cineasta Ken Loach, que ya lleva dos por sorpresa. Un film de seres humanos, que presenta cierta artificiosidad por los mismos y reiterados motivos del cine de este realizador: la recurrente crónica maniquea entre la población obrera y los líderes del sistema. La película se agarra a este discurso y a pesar de su buena realización y las buenas labores interpretativas de sus dos protagonistas (Dave Johns & Hayley Squires), resulta distante, a pesar de la fuerte intencionalidad emotiva que maneja. Es díficil adentrarse en una película que supuestamente habla sobre las voces de la verdad, o simplemente de la realidad, cuando su estructura ideológica se antoja tan poco creíble y alejada de lo que realmente planea en nuestra vida, convierténdose más en un panfleto que en una crónica de la realidad social. En contraste a este gran defecto, mencionar junto a lo ya mentado, la admirable puesta en escena de una visión tan madura como la de Loach.

La tercera y última película del día es la de ese director entrado en decadencia artística, que es Oliver Stone. "Snowden" (Sección Oficial fuera de concurso), de clara vocación política (nada nuevo en el frente), retrata la hazaña de Edward Snowden en 2013 al publicar en el diario The Guardian documentos clasificados de la NSA. Retrato de esta figura y su enmienda que pretende aludir a numerosas cuestiones sobre la seguridad y la intimidad de nuestra actualidad más inmediata. La película abusa de una fórmula muy utilizada por la industria norteamericana, que se trata de abusar de muchísimo contenido técnico para de este modo inflar las carencias de un discurso que directamente maltrata a sus personajes. Las marionetas de este guiñol resultan indiferentes y a veces insoportables, ante la falta de credibilidad que manejan, y la película no para en todo su metraje de soltar verborrea, que agota y hace que la película sea soporífera, por no utilizar otra serie de calificativos. Tampoco el errático trabajo de dirección o las mejorables interpretaciones ayudan, a pesar del buen funcionamiento técnico. Pues, estamos ante un film impostado, más preocupado en aparentar supuesta trascendencia que en crear un discurso honesto e interesante.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Cuarta jornada

La jornada del martes nos presenta un día muy prolífico, ya que hemos podido asistir a la proyección de cinco películas muy diferentes. Fuera de lo visto, se ha hablado y muy bien de las películas "Alba" y "Rara", ambas de Horizontes Latinos, sección que por segundo año consecutivo se está convirtiendo en la que presenta mayor calidad cinematográfica del festival. 


La primera película de la jornada, "As You Are" (Sección Oficial), de Miles Joris-Peyrafitte, ha sido muy mal recibida (se escucharon abucheos en el pase), y no es para menos, ya que este intento de mostrar la homosexualidad durante la adolescencia en un país tan concreto como Estados Unidos, naufraga por todos los frentes. Aludiendo en cierta manera a la reciente "Los héroes del mal" y a otras películas generacionales, el film se presenta de una forma y acaba determinando en un tema muy concreto. Su análisis y planteamiento se antojan forzados. La película no avanza y la credibilidad que maneja se desploma poco a poco. Es inevitable aludir a continuas comparaciones, pues la película se asemeja a otras muchas pero con menor calidad. Tampoco ayuda una dirección errática, y con momentos prescindibles, ni unos trabajos actorales mejorables de sus tres protagonistas (algún secundario brilla). Lo que mejor funciona es sin duda un trabajo fotográfico que dota a la película de cierta atmósfera ante las cojeras de un guion que no sabe por donde salvarse.

Una de las cintas que más ha abrumado en el certamen donostiarra hasta ahora, ha sido "Playground" de Bartosz M. Kowalski y competidora en Sección Oficial. Un film sobre el declive generacional a través del mal uso de las nuevas tecnologías. Una película de apariencia exquisita y rompedora que, aunque con ciertas carencias en la matización de sus giros narrativos, y por ende de sus personajes, deriva en una de las escenas finales más abrumadoras que hemos podido ver. Esos veinte minutos de plano general, viendo la agonía del ser humano, escuecen y mucho, y lo hacen de forma realista, sin efectismo, mostrando el ahogo de una realidad que está muy presente. Tal daño ha provocado la escena, que las filas para salir de la proyección eran numerosas, ante tal masacre en la pantalla. Una película que perdura y sin duda crece en la cabeza de quien la asimila. Huele a premio, si el Jurado decide arriesgar.


Juan Antonio Bayona, vuelve a ser uno de los protagonistas de este festival, gracias a "Un monstruo viene a verme" (Sección Oficial fuera de concurso). Una película que ha recibido grandes alabanzas, pero que nos ha decepcionado personalmente. Es una película que intenta ser emotiva y resulta forzada en la mayoría de sus cometidos. La introducción fantasiosa, a través de relatos algo estúpidos, está cogida con pinzas, lo que provoca que el avance de la trama se atragante y llegue a derivar en un producto insípido. Es tal el interés por dar forma a este aspecto de la obra, que se pierde la posibilidad de dar complejidad a unos personajes que se encuentran desdibujados, y se acercan más a la caricatura y al estereotipo que a la vida real. En constraste, hay que admirar, una vez más, en el cine de Bayona, el conjunto técnico: los extraordinarios efectos especiales, la notable fotografía de Óscar Faura, el trabajo de ambientación o la bonita composición de Fernando Velázquez, todo al servicio de un trabajo de dirección que esta vez muestra sus cotas más bajas. En cuanto a las labores de interpretación, hay que admirar el esfuerzo de Felicity Jones y del niño, Lewis MacDougall, que hacen lo que pueden ante el irregular material que manejan. Sin duda, una de las grandes decepciones (hasta el momento) de este festival.


Ya adentrándonos en la nocturnidad, admiramos la cinta "Frantz" (Perlas), de François Ozon. Una bellísima película que construye un relato, repleto de subtextos. Es indiscutible la maestría ya sabida de Ozon para otorgar sensibilidad a lo que se ofrece en pantalla, esta vez reforzada por un ajuar técnico envidiable (brillantes fotografía y ambientación), pero en esta ocasión es interesante también remarcar un mensaje que no vuela en la superficie, sino que se encuentra en lo más profundo de cada uno de los personajes. Y ahí, reside el interés de esta cinta, en la capacidad de desglose e interpretación que maneja, gracias a sus metáforas y a su capacidad para acumular tanto contenido oculto y prestarlo al servicio del espectador. La mirada de Paula Beer traspasa cualquier pantalla, así como las palabras de Pierre Niney, para hacernos partícipes, casi cómplices de los entresijos de esta película mayúscula, obra maestra inmediata.

La jornada termina con la nueva apuesta cinematográfica del serbio Emir Kusturica, "On the Milky Road" (Perlas), muy de la tendencia de este realizador, pero con ello, insólita. A pesar de ciertas imperfecciones, especialmente acumuladas en ese alargado y desmadrado tramo final, la película maneja las armas de la comedia con habilidad, y construye un cuento que atina a combinar las facetas más creativas con el ejercicio más social. El pulso de Kusturica es notable y anima a construir un film en el que el ritmo se mantiene de principio a fin. Algunos secundarios brillan especialmente, y la factura técnica es extraordinaria. En especial esa ambientación y esa música tan propias de este universo, que consiguen que salgas del cine con una sonrisa. Es una película para dejarse llevar por su aluvión de explosiones y sensaciones, pues en definitiva es el mayor reclamo que medita un film tan imperfecto como interesante.

Y mañana, más y mejor...

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Tercera Jornada

Con un poco de retraso llega la crónica del lunes (estamos a miércoles ya), para hablaros de lo más destacado de una jornada ciertamente irregular. Las críticas han aupado en esta jornada películas como "Era o Hotel Cambridge" (Horizontes Latinos) y Bar Bahar (Nuevos Directores) que han obtenido un aplauso casi unánime de la crítica. Pero nosotros nos hemos centrado en películas incluidas dentro de la Sección Oficial (las cuatro visionadas en la jornada del lunes).


La primera cinta, ha sido la mejor del día con diferencia. Hablamos de la británica "Lady Macbeth" de William Oldroyd. Una película que a pesar de su convencional trama, y la austeridad que maneja, defiende con solvencia un discurso repleto de sutilezas. La película, basada en una novela de Nikolai Leskov, recrea el conocido mito femenino con gran presencia formal y un contenido para degustar lentamente. Los encuadres y en general la amalgama audiovisual cerca están del ejercicio pictórico, con claros referentes en este campo (Hopper, Vermeer, me vienen así de pronto). La cuidada fotografía y en general, el minimalista pero acertado trabajo de arte propician una creación de atmósfera absolutamente envolvente. El guion preciso en sus giros y palabras nos propicia una narración del mito en la época decimonónica, a través de los ojos de una muy bella mujer, que adquiere dimensiones que merecen ser meditadas minuciosamente de acuerdo al contexto y la situación particular que maneja. El reparto en conjunto ofrece un excelente trabajo, pero es ella, en su precisa y desafiante mirada quien acumula todos los elogios. Florence Pugh nos regala una composición notable que engrandece este relato de interesantes consideraciones, resultando gran favorita para la Concha de Plata a la mejor actriz. Sin olvidarnos, que esta película también podría ser una candidata muy firme al premio grande, y también al de fotografía.


Siguiendo con la Sección Oficial competitiva, navegamos al universo social de la mano de el sueco Johannes Nyholm, que en "The Giant" configura una mezcla entre la fantasía y la realidad. La película, aunque determina un relato de ficción, adopta la postura estética del docudrama, ofreciendo cierta visión Dogma, que hace que no perdamos la conciencia social sobre lo que contemplamos: la historia de una persona diferente (autismo con deformidades graves), que se plantea como una dialéctica entre la ciencia y la cultura. La película atiende a remansos de fantasía, como si una especie de aventura de Tolkien invadiera la pantalla. Esta decisión resulta forzada, al igual que el último tramo de la película que atiende a la sensiblería más facilona. El guion se va deshaciendo poco a poco hasta llegar a momentos que provocan la risa involuntaria. Tampoco ayuda una dirección que se muestra torpe a la hora de poner énfasis en lo que cuenta, provocando por momentos la rutina soporífera. En definitiva, una película fallida y prescindible, que por su temática y su nacionalidad (Bille August es el presidente del Jurado) huele desde ya a Premio especial del Jurado.


Fuera de competición, aunque enclavada en esta sección, encontramos la nueva cinta del controvertido Nacho Vigalondo. "Colossal", aunque bañada en factura hollywoodiense y con una Anne Hathaway, que se presenta como lo mejor de la cinta, sigue siendo más de lo mismo. Vigalondo sigue en la senda de su frikismo y se ríe descaradamente de la inteligencia del espectador con una película inoportuna y que no hay por donde cogerla. Sus diálogos, sus momentos y sus intenciones son abolutamente ridículos y resulta muy difícil entra en una cinta que no sólo no resulta creíble, sino que no muestra ningún amago de habilidad o inteligencia. Un director que se ha hecho de oro gracias a un séquito fiel que estreno tras estreno defiende lo indefendible. Productos absolutamente deficientes que aluden al humor más bañado de inoportunismo para configurar películas rarísimas (en el peor sentido de la palabra). Hasta ahora, la peor cinta del certamen, con diferencia.


Terminamos la jornada con el homenaje a ese interesante realizador ya fallecido llamado Bigas Luna. Piedra angular de nuestra filmografía que en "Bigas x Bigas", codirigido entre él y Santiago Garrido Rua, configura a través de grabaciones caseras, un retrato íntimo de ciertos años de su vida, con claro énfasis en los ejes vertebradores de su obra, y por ende, de su vida. La película se sigue con comodidad y resultante interesante, pero poco o nada aporta desde el punto de vista de documento audiovisual, ni desde la óptica artística. Un ejercicio que como homenaje resulta honesto, pero más allá de ello se pierde en el olvido.

Y en unos instantes, la crónica de ayer martes...

lunes, 19 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Segunda Jornada

Ya a lunes, y la jornada de domingo (la segunda para un servidor) nos ha deparado un conjunto de títulos de gran interés, y que marcarán con firmeza las alabanzas de los próximos meses. Fuera de lo visto, se ha hablado y muy bien de la chilena "Aquí no ha pasado nada" (Horizontes Latinos) y la suiza "Ma vie de courgette"(Perlas), representante suiza a los Oscar y ganadora del último Festival de Annecy. La jornada ha seguido lluviosa, y ha tenido un nombre claro: Isabelle Huppert, que ha protagonizado el día con dos grandes películas. 

La jornada ha empezado con la nueva película de ese interesante realizador francés llamado Bertrand Bonello, "Nocturama" (Sección Oficial). Un film, que bien dirigido y respaldado por una buena factura técnica, despliega sus valías narrativas en la primera mitad, y las abandona por completo en la segunda. Estamos ante una irregular película por culpa de esa quiebra entre las dos partes. La crónica reflexiva sobre el terrorismo a la que nos invita la película se antoja en ocasiones demasiado oportunista y la cinta se alarga innecesariamente en un final que huele demasiado a grandilocuencia impostada. El diseño de ópticas sobre el conflicto se antoja acertado, pero el desarrollo de las mismas atiende al más puro efectismo. Con ello, no podemos dejar de admirar una película única en su tratamiento del terrorismo en Occidente.

La siguiente película, galardonada con un Oso de Plata en el último Festival de Berlín, es de la estimable realizadora Mia Hansen-Løve. "El porvenir" (Perlas) habla sobre los devenires de la vida a pesar de los cimientos ideológicos asentados sobre la humanidad. Las inquietudes de esta profesora de filosofía en comunión con los diversos entes generacionales nos fraguan una película de tiempos detallados, de diálogos honestos y personajes repletos de vida. Es un film que arriesga a mimar cada uno de los momentos que desarrolla, siempre con la idea clara de relacionar la vida, la honesta realidad, con las directrices de un discurso repleto de referencias filosóficas. Lo introducido navega con naturalidad, alejado de la impostura o la pedantería que provoca el mal uso de los ejercicios literarios o filosóficos. Y por encima de todo, está ella, una Huppert valiente, capaz de todo, que brilla en su humana composición y lidera con firmeza las derivas que a veces te puede deparar la vida.

Una de las películas que más expectación ha levantado hasta ahora dentro del conjunto del films de Sección Oficial y en general del festival, ha sido la nueva y muy diferente apuesta cinematográfica de Rodrigo Sorogoyen. "Que Dios nos perdone" ha despertado un gran entusiasmo tras su proyección, y huele a premio por todos lados, en especial para su portentoso protagonista Roberto Álamo. Si bien, las coincidencias personales con el notable trabajo de Álamo se mantienen, por lo demás advertimos una película que con una trabajada factura técnica y un guion bien desarrollado, resulta irritante en su primera parte, en la que el humor está introducido con calzador y se perfilan unos personajes llenos clichés y que navegan por la senda de los lugares comunes. Es una película con pulso, pero al mismo tiempo se advierten cojeras de guion y ciertos cabos sin atar. En cualquier caso, hará las delicias de quien disfrute de este género y desde ya huele a premio en el palmarés del sábado. Especial mención a ese secundario de lujo que es Javier Pereira y que firma un personaje único.

Terminamos la jornada con una auténtica joya. Paul Verhoeven, realizador holandés, conocido por "Instinto básico", ya sorprendió en Cannes con su última película "Elle", consiguiendo las máximas alabanzas del certamen galo, hasta tal punto de conseguir ser la mejor valorada de todo el festival. No es para menos, tras sus anteriores trabajos, irregulares ejercicios, Verhoeven vuelve en muy buena forma, configurando una película absolutamente única. Sus destrezas viajan por el humor más negro articulando momentos que viajan entre la abrumación y el descaro, todo ello bajo un pulso siempre firme y un ejercicio técnico envidiable. La película se mantiene en todo momento, y la grandiosidad de su ingenio persiste de principio a fin, todo al servicio de Michèle Leblanc, ese personaje único, que transita por los lugares más oscuros de la humanidad con absoluto desparpajo y plantea reflexiones que traspasan numerosas fronteras morales. Esta creación queda perpetrada en la retina y no se despega de tu cabeza, porque pocas veces se vertebra un ejercicio tan original como apasionante marcando un verdadero hito en la creación cinematográfica contemporánea. Y como no, para darle voz y cuerpo, allí está ella, una de las actrices más inmensas del mundo, una Isabelle Huppert que una vez más brilla y en esta ocasión con más fuerza, si cabe, en uno de los mejores trabajos interpretativos de los últimos años, y que esperamos recoja numerosos galardones en los próximos meses. Una película que presumiblemente el tiempo colocará en su lugar como obra de culto.

Y volviendo a nuestro presente, nos despedimos hasta mañana que hablaremos de una jornada que a priori se presenta algo irregular....

domingo, 18 de septiembre de 2016

LXIV Festival de cine de San Sebastián 2016. Primera Jornada

Ya estamos en el Zinemaldia, el certamen cinematográfico más importante de España, donde podremos disfrutar de numerosos títulos distribuidos en diversas secciones a lo largo de más de siete días. Llegamos con retraso, dejando en el tintero algunas películas interesantes que por cuestiones de tiempo no podremos visionar, aunque serán nuestro objetivo en próximos meses conforme a su disposición de estreno. Bajo un día inestable marcado por la lluvia y el viento, Donostia ya escucha ecos de cine, y lo hace bajo el abrigo de películas como "La doctora de Brest", de Emmanuelle Bercot, película que ha sido recibida de forma desigual, aunque concidiendo en las posibilidades de su actriz protagonista en el Palmarés del sábado próximo. También se ha podido disfrutar de una "Orpheline", de Arnaud des Pallières, tratada muy negativamente por la crítica, o de una "Yo no soy Madame Bovary"de Feng Xiaogang, recibida de igual modo con frialdad, aunque con opciones de premio (fotografía y actriz). En la paleta de buenas vibraciones destaca "Neruda" de Pablo Larraín o "Toni Erdmann"(Gran premio Fipresci), ambas aplaudidas en Cannes y que aquí han cautivado a los presentes. En Sección Oficial, "El hombre de las mil caras" ha recibido buenas críticas (aunque no entusiastas) y ya huele a premio (¿Quizás Eduard Fernández en su composición de Paco Paesa?. Estos son los ecos de crítica y público de un festival que para nosotros arranca en sábado, después de las revueltas del viernes bajo los gritos nacionalistas de la gala de inaguración en el Kursaal y tras muchas horas de proyección de buen cine, así que vamos a empezar a hablar de lo que vemos. En este ya pasado sábado hay que señalar sólo dos obras:


Por un lado, hablamos de la última película del islandés Baltasar Kormákur, "The Oath" que compite en Sección Oficial. Kormákur desde que inició su salto hollywoodiense no ha vuelto a levantar cabeza con películas absolutamente nefastas como aquel producto intragable llamado "Contraband". Esta nueva apuesta bañada de sangre intenta compilar lo mejor del psicothriller, pero falla en sus pretenciosas aspiraciones. El arranque es notable, pero el avance de la película va derivando hasta una consecución de excesos y artificios que conjugan en un final de absoluto despropósito. Tampoco ayudan ciertos excesos técnicos, y una dirección muy efectista a la hora de dar credibilidad a lo que se ve en pantalla. Los actores hacen lo que pueden (algún secundario brilla, por momentos) y la fotografía acompañada de la acertada música hace que el avance no se detenga en la multitud de fracturas que maneja este irregular guion. En resumidas cuentas, una película que entretiene pero que lejos queda de sus claras pretensiones.


Por otro lado, asistimos con expectación a la primera película de Nely Reguera "María (y los demás)". Una película llena de frescura, de ingenio y de vida. La cinta recorre a través de la comedia los pormenores del ser humano, de sus relaciones sociales y en concreto del núcleo familiar a través de una historia que crece en sus detalles. La amalgama de personajes es rica por su variedad y su verdad, y aunque es una película imperfecta, con ciertos momentos sobrantes, el conjunto alude con distancias a lo mejor de esa gran cineasta catalana que es Mar Coll (y su "Tres días con la familia"). Se agradece una película de este tipo en un festival llamado a la extensión y a la supuesta complejidad. Mención especial para el inspirado reparto, y en especial una impagable Bárbara Lennie, que ojalá sea reconocida como merece por este meritorio trabajo.

...Y bueno, vamos a por este lluvioso domingo, que ya ha empezado de la mano del cine francés.

Palmarés VIII Premios Blogger Albertaco 2016

Mejor película:
El club, de Pablo Larraín












Mejor dirección:
Pablo Larraín "El club"










Mejor interpretación masculina protagonista:
Guillermo Francella "El Clan"











Mejor interpretación femenina protagonista:
Inma Cuesta "La novia"









Mejor interpretación masculina de reparto:
Alfredo Castro "El club"












Mejor interpretación femenina de reparto:
Jennifer Jason Leigh "Los odiosos ocho"













Mejor dirección novel: 
László Nemes "El hijo de Saúl"











Mejor actor revelación:
Jacob Tremblay "La habitación"












Mejor actriz revelación:
Günes Sensoy, Doga Zeynep Doguslu, Tugba Songuroglu, Elit Iscan & Ilayda Akdogan "Mustang"











Mejor reparto:
El club










Mejor pareja cinematográfica:
Michael Fassbender & Marion Cotillard "Macbeth"










Premio del Público:
Mustang, de Deniz Gamze Ergüven










Premio Especial Albertaco:
In the Crosswind, de Martti Helde, por "su arriesgada y admirable postura para construir un discurso único sobre los horrores de la guerra, sin caer en maniqueísmos o sensiblerías, y por su portentoso trabajo audiovisual favorecido por un ejercicio técnico notable."











Mejor guion original:
Deniz Gamze Ergüven & Alice Winocour "Mustang"











Mejor guion adaptado:
Andrew Haigh "45 años"












Mejor fotografía:
Miguel Ángel Amoedo "La novia"








Mejor música original:
Shigeru Umebayashi "La novia"



Mejor canción original:
"Palmeras en la nieve" de Pablo Alborán & Lucas Vidal (Palmeras en la nieve)


Mejor sonido:
Tamás Zányi, Tamás Beke & Tamás Székely "El hijo de Saúl"


Mejor montaje:
Matthieu Taponier "El hijo de Saúl"











Mejor dirección artística:
Dimitri Capuani & Alessia Anfuso "El cuento de los cuentos"












Mejor diseño de vestuario:
Massimo Cantini Parrini "El cuento de los cuentos"









Mejor maquillaje y peluquería:
Gino Tamagnini, Valter Casotto, Luigi D'Andrea & Francesco Pegoretti "El cuento de los cuentos"












Mejores efectos especiales:
Andrew Whitehurst, Paul Norris, Mark Williams Ardington & Sara Bennett "Ex Machina"



Premio a la poesía:
La novia, de Paula Ortiz








Premio "Reflejo social":
Techo y comida, de Juan Miguel del Castillo










Premio "Entretenimiento familiar":
Del revés (Inside Out), de Pete Docter & Ronnie Del Carmen










Premio honorífico:
Abbas Kiarostami